La
“cultura de café” es algo que siempre me ha interesado—pero no es solamente
porque me disfruta mis tazas diarias de café. También esta fascinación no es
acerca de la cultura de café de las cafeterías con sus máquinas para espresso. Se
trata con el cultura de café en su nivel base en las montañas donde el café
esta cultivado y con los caficultores quien lo producen. Agrega abejas adentro
de esta mezcla y está aún más intrigante.
Este
es una continuación de una entrada anterior en este blog, Reflexiones
Sobre La Apicultura y Café. Este es un viajecito por medio de fotos a la finca de café
donde tengo un apiario de abejas en colmenas marimbas o Kenya.
Frutos de café madurando. Idealmente el
gente se corta solamente las cerezas rojas para asegurar un café de calidad. Necesita
torcer cada cereza individualmente para quitarla de la rama, que se hace la
cosecha muy intensiva con mano de obra. Este asegura que no daña la formación de
los siguientes brotones y flores
Trabajadores miden el café que
cortaron durante el día. Después de empecer temprano en la
mañana, los cortadores terminan su día temprano en el tarde cuando ellos traen
su saco (¡o sacos!) de café al beneficio, el edificio donde se despulpan y
lavan el café. Ellos ganan según la cantidad de “latas” que cortaron. La
temporada del corte de café es un tiempo de abundancia para la gente de las
montañas a causa de los ingresos extras que ganan cosechando café. Es mucho más
lucrativo que los trabajos normales en la finca, como podar o fertilizar las
plantas.
Próximo paso—despulpar. Durante este proceso
las cerezas de café pasan por una molina que quita la cascara roja exterior con
parte de la pulpa blanca interior, para separarlo del grano en el centro. Se
caen en la molina desde una pila arriba donde los cortadores miden la cosecha del
día. Un poco de presión de sus dedos puede fácilmente separar el grano de la cascara
y pulpa de una cereza madura.
Se deja que los granos de
café remojan en pilas de cemento por lo menos un día después
de quitar la cascara roja exterior. Este proceso ayuda a lavar el parte mocoso (mucílago)
que cubre el grano en el centro. Los
granos están secados después de lavarlos.
Granos de café secándose
en un patio de cemento en el valle abajo la finca. El café
se seca mucho mejor durante la época de cosecha en la clima caliente y seca del
valle (¡Hasta puede encontrar cactus allá!). Trabajadores constantemente dar
vueltas a los granos con rastrillos para asegurar que se secan uniformemente. Eventualmente
debe remover un pergamino interior que cubre este grano antes que la tostada
final.
La senda que pasa al
apiario atreves de la café. El
apiario está ubicado por la orilla de la finca, por los arboles altos que mira
en el fondo del foto. La caminata a las colmenas es acerca de 150 metros desde
el lugar donde uno deja el camión por el beneficio para procesar y lavar el
café. Todo es cuesta abajo hacia el camión cuando sale del apiario, facilitando
la llevado de los baldes de miel.
En la colina arriba el apiario. Los arboles grandes atrás de las colmenas son liquidámbar.
Las abejas recolectan propóleos hecho de su sábila. Gente usa esta resina para propósitos
medicinales. Adentro de la línea de árboles el terreno se baja abruptamente
acerca de 10 metros hasta una quebrada que fluye por aquí. Las plantas con
grandes hojas en el frente del foto son bananos, que se usa temporalmente para
sombra para el café, hasta los arboles más permanentes de sombra crece
suficientemente.
Una de las desventajas de la finca es
su terreno quebrajoso. Básicamente
todo va por arriba y abajo haciendo la llevada de las trampas lleno de abejas
una tarea difícil a veces. Aquí Marcos, el dueño de la finca y mi socio con el
apiario, tiene dos trampas para guindar en árboles.
La vista del valle desde
la finca de café. Hay aproximadamente 600 metros de
diferencia entre el fondo del valle y la finca, que está situado en 1,200
metros sobre el nivel del mar. La diferencia en temperaturas es notable,
haciendo las visitas placenteras durante la época de clima caliente y seco.
Durante la época lluvioso, sin embargo, puede tener lluvia y llovizna sin parar
cuando frentes fríos pasan por este parte de América Central.
El camino hacia la finca. Aunque la finca de
café queda solamente ocho kilómetros en línea recta desde el pueblo, tarda 40
minutos manejar hacia allá a causa de la ruta del camino, con curvas que lleva
la carretera a una dirección y otro. El viaje va despacio también a causa del
pendiente del camino y los baches y rocas con que uno necesita tratar. Durante
lluvias fuertes y prolongadas en la época lluvioso, uno a veces no puede llegar
a la finca hasta la carretera tiene tiempo a secarse por un par de días.
Entrando uno de las
colmenas marimbas para revisar las abejas y chequear su
esfuerzos en producir miel. Al contrario de las colmenas marimbas abajo en el
valle, estas pueden llenar su caja de un extremo al otro. Cada caja tiene
aproximadamente 35 barras de lo cual la mitad puede ser miel. Las zonas cafetaleros
son una de los mejores áreas para la producción de miel en Honduras.
Guindamos trampas in
arboles alrededor
de la finca para agarrar enjambres, de colonias silvestres en el área pero también
de algunas de los colmenas que enjambran. Las trampas tienen las mismas dimensiones
de las cajas permanentes para facilitar la transferencia de los panales. No me
gusta tanto dividir colmenas de abejas Africanizadas a causa de ser muy
defensivo, especialmente cuando entran el área de cría. Atrapar enjambres es muy
fácil y tengo mucho éxitos hacerlo.
Marcos llenando un balde
con panales de miel. Con colmenas marimbas, se usa un
sistema sencillo de cortar y deshacer los panales para cosechar y extraer la
miel. Se corta el panal de la barra y se deja caer en un balde. Luego en casa se
deshace los panales para permitir que la miel sale goteando. Yo uso un
filtro/colador sencillo que hice de un balde de cinco galones. No se usa un centrífugo.
Deja algunas de los panales más bonitas para vender en esta misma forma.
¡Panales de miel!
Sofía, mi esposa, ayudándome
revisar colmenas. Ella tiene un panal lleno de cría. Mis
caja tienen una profundidad de 12 pulgadas, haciendo que cada panal es más o
menos el equivalente de un marco profundo de una colmena Langstroth.
Marcos y yo con las
colmenas en la finca de café. Todas las abejas son Africanizadas
pero normalmente puede andar cerca de las colmenas sin poner su velo mientras
no abre o toca las cajas. En este momento tiene que tener un traje completo.
---Tom
Para leer este relato en
inglés, va a mi otro blog, “Musings on Beekeeping.”