lunes, 15 de septiembre de 2014

¡Bienvenidos y Welcome! Comenzando mis reflexiones.



Una bienvenido siempre parece ser la manera más apropiada para empecer un blog, así…Welcome!


La tema general de este blog será las abejas, pero adentro esta gran tema yo puedo verme hablando acerca de el en un variedad de maneras. Anticipo que será anécdotas de mi travesía en la apicultura, noticias de que hago con mis colmenas, artículos instructivos, reflexiones acerca de estos insectos fascinantes, y otras cositas.

Yo, tomando un descanso de la faena apícola y usando el banco de las colmenas como silla—en el apiario que tengo en una finca de café en el parte oeste-central de Honduras
 
Mi viaje en la apicultura empezó por accidente en 1991—era algo que nunca cruzó mi mente. Me gradué de una universidad en Wisconsin en los Estados Unidos con un título en periodismo escrito y Estudios de América Latina. A graduar de la secundaria, mi idea siempre era combinar los dos en una manera. Conseguí experiencia en periodismo durante mi tiempo en la universidad, trabajando con el periódico estudiantil y con dos de los periódicos locales. Mi español faltó mucho. Yo quiso aprenderlo pero no era mi enfoque principal durante mis años en la universidad. (Todavía no es perfecto pero gracias al corrector ortográfico para ponerme los acentos y corregir mis problemas con palabras masculino y femenino!)


Al graduarme y pensando cómo mejorar mis habilidades lingüísticas en español, una de las maneras más obvios era atreves del Cuerpo de Paz (“Peace Corps,” una organización de voluntariados de los Estados Unidos). Usted vive por dos años en otra cultura, hace buen trabajos por otros, y usted tiene que aprender español. Yo pasé por el proceso de entrevistas y finalmente recibió la llamada memorable.


“Nos gustaría invitarle ser parte de Cuerpo de Paz Honduras,” dijo la señora en el teléfono. “¿Como parece?”


“Magnifico,” le respondí. Honduras es parte de América Latina y allá es donde quiero estar.


“También nos gustaría que usted seria parte de nuestro programa de apicultura que tenemos allá. “¿Como parece este?”


“Sueña bien,” yo le dije sin pensarlo a fondo. Honestamente, que estaba pasando por mi mente era que si este me llevaría hacia Honduras, entonces por qué no.

 Mi grupo de entrenamiento de apicultura durante mi tiempo con Cuerpo de Paz, en la Escuela Nacional Agrícola en Catacamas, Olancho, Honduras, Enero 1991.


Un taller acerca de apicultura para otros voluntarios de Cuerpo de Paz en 1993. Sí, soy yo, aquel con pelo largo y una barba por la derecha. Intenta identificar la versión limpio de yo en el foto anterior—Cuerpo de Paz hace este a los voluntarios.

Así me metí en el mundo de la apicultura en una manera accidental. Hasta aquel tiempo mi única experiencia con las abejas estaba congelándome cuando  un abejón vendría a zumbar alrededor mi cabeza como niño jugando en el patio, esperando que se vaya. También consistió en  siempre tener un sándwich de crema de maní y miel al regresar a casa después clases (“¡Mama, tengo hambre! ¿Qué hay de comer?” Miel y crema de maní siempre estaban presentes en el armario de comida.)

Así comenzó mis aventuras en la apicultura, con la abeja “picándome” fuert durante nuestro entrenamiento con Cuerpo de Paz. Después 23 años ellos siguen hacerlo. Había altos y bajos durante este travesía en apicultura, pero eso “ositos de néctar” siempre han continuado tener un papel en mi vida. Usted puede planificar su carrera tanto que puede pero en realidad nunca sabe dónde la vida va a llevarle.


Después de casarme con mi esposa Hondureña, decidimos intentar hacer nuestra vida en Honduras. Allá estoy todavía. He tenido varias experiencias de empleo durante estos años pero las abejas siempre han quedad como parte de esta mezcla.


Atreves los años yo he tenido la oportunidad trabajar con varias operaciones apícolas comerciales. Uno era una granja de melones en el sur de Honduras quien necesitaba las colmenas para polinización. El otro era con un apicultor comercial en el parte central de Wisconsin (donde me crecí) con casi 2000 colmenas para el producción de miel y polinización de almendras.

 Abejas en el parte central de Wisconsin—cargados y listos para trasladarse a los fincas de almendras en California.

La extracción de miel en el operación de John en el parte central de Wisconsin. John está en el izquierda—un hombre sabio con mucha experiencia apícola.

Yo he tenido la oportunidad seguir enseñando la apicultura después Cuerpo de Paz, lo más reciente con la programa de Agricultor a Agricultor atreves de Compañeros de la Américas con apicultores en Jamaica. En Julio de este año completo mi tercer misión con este proyecto que está promoviendo colmenas Kenyan (o marimbas como decimos en Honduras) y apicultura natural/sostenible.

 Construyendo trampas de polen para colmenas Kenyan con apicultores de la Asociación de Apicultores de Santa María en la costa norte de Jamaica.

Así, con esto termina la primera entrada en mi blog. Until the next one (hasta el próximo)…

--Tomás

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